De Chanco con amor

25 agosto 2013

VIVO DE ILUSIONES

Así como Don Nicanor Parra habla del Hombre Imaginario, tengo la sensación de vivir ilusiones, aún más evanescentes que lo imaginario. La ilusión suena todavía más inasible que la apariencia de Platón, también. Parece más efímera y leve.Para los que se sienten en este mundo donde pareciera que todo desaparece: VIVO DE ILUSIONES: Me alimento de ilusiones/ ( mis manzanas son ilusiones)/ hago música con instrumentos/ que son ilusiones/ (soplo flautas que son ilusiones)/ escribo poemas que son ilusiones/ en cuadernos de ilusión/ tomo fotografías de ilusiones/ con cámaras de ilusión/ compro libros de ilusiones/ con dinero de ilusión/. Vivo de ilusiones/. Mis ilusiones existen/ Sólo que a veces/ no aparecen ante mis ojos/. Se me extravían/ en una nada de ilusión/. Pero existen./ Y su existencia es ilusoria/. Tan ilusoria como mi vida/ y la tuya/.

23 agosto 2013

MÁS ALLÁ

Un homenaje a seres generosos que dieron su vida por sus ideales y sus convicciones: MÁS ALLÁ. / En los versos/ en la voz/ sin vacilaciones/ sin vasallajes/ más allá / de los vejámenes/ valerosos/ venturosos / velando / por la verdad / ¡Violeta y Víctor viven!

20 agosto 2013

Creo...

Una nueva y bastante antigua reflexión: Creo que más allá/ está el creer en ti/ y también crearte/ con toda fe./ Más allá / encuentro el horizonte/ del nacimiento/ y el de la muerte./ Más allá todavía/ un poco de felicidad/ un puñado de recuerdos/ un ramo de dedales de oro/ y un racimo de aromo.

Precauciones

Desde Pelluhue, con dolor. Hace poco más de un mes, un ángel nos dejó. Mi sobrina nieta Amanda Pineda García, de doce años de edad, sufrió un accidente en la playa de Curanipe, cabalgando sobre un caballo que no estaba adiestrado para pasear niños, sino para correr a toda velocidad en competencias campesinas. Lamentablemente, no previmos la tragedia. Querríamos que no volviera a
ocurrirle nada semejante a nadie, menos a un niño o niña. Las personas que arriendan estos animales deberían saber los riesgos que se corren. Lo mismo sucede en otras áreas de las actividades turístico-recreativas locales, como son bañarse en playas no aptas para ello, bucear o surfear sin precauciones, en fin, realizar cualquier deporte sin las debidas medidas de seguridad o sin guía o sin supervisión. Recomendamos, especialmente a quienes nos visitan, que no conocen el territorio y sus posibles peligros, que no corran riesgos innecesarios; a los adultos, que supervisen y protejan a los menores, a los niños y jóvenes que no se arriesguen innecesariamente y a quienes ofrecen servicios, que lo hagan responsablemente.

06 agosto 2013

Algo sobre la Vía Láctea

Entre los poemas hay sobre las estrellas de nuestra Vía Láctea. Va el número III:Limito con el polen del girasol/ordeño mil odres de vino dulce/me elevo con las tórtolas mañaneras/ y sin embargo lloro. En los pastos asoleados reverbero/mis brazos se alzan en candelabros/acaricio los pétalos de otras vidas/ y sin embargo lloro. El metal no me corroe los huesos/las hojas discurren en mi boca/converso con las espumas primaverales/ y sin embargo lloro. Me traspasan el alma las brisas de noviembre/azuzándome a recoger el rocío/en el brillo de tus ojos sedientos/ y sin embargo lloro. LLoro porque no hay un alma/ que me proteja del polen/ lloro porque mis brazos duelen/ lloro porque los pétalos no son míos/lloro porque colecciono objetos inútiles/ como los odres de vino/ como las hojas viejas/como las gotas de rocío/ como los pastos asoleados/como la espuma inocente/ lloro porque todo hiere/ irremediablemente.

05 agosto 2013

Maqui.

Un poema de recuerdos infantiles y juveniles. Maqui: Flor del maqui, no te recuerdo, o no te conozco. Madre del fruto que tiñe oscuras las bocas de mis niños con sus pechos de leche morada. Se cuelgan de ti, se balancean, te desgajan las ramas para robar tus bayas negras. Pierden el apetito satisfechos con tus pezones agridulces. Todos debemos perdonar tu imprudencia espontánea, porque estás aquí y estás allá, estás en todo lugar, como la Pachamama y el Padre Eterno.

Razones.

Desde Pelluhue, envío poemas mínimos a quienes quieran compartir mi admiración por la naturaleza y el ser humano. Tengo ahora motivos sumamente poderosos para mostrar escritos que han estado por años guardados entre papeles de docencia. Van especialmente dedicados a los que aman, a los niños, a los indefensos, a los adultos mayores y a todos los hombres y mujeres que luchan cada día por sus familias con paciencia, perseverancia, esperanza, desesperanza, lágrimas y sonrisas. Para ti, especialmente , Amandita...

Sobre poesía mínima.

La poesía mínima que presento , guardando las distancias, sería equivalente al minimal art de las artes visuales. Intenta seguir la línea de la poesía medieval franciscana, simple y con temática cercana a la naturaleza: las aguas, la flora, las piedras y rocas, la Vía Láctea... Es una forma sencilla de admirar la creación , sea vista como una manifestación de la materia, como fruto de la mente humana o la expresión de un espíritu superior. Como estos versos libres, escritos después de mirar un trozo de rutilio: Rutilio: El sentido de pertenencia al sistema solar,/ la sensación eterna/ de ser una estrella/ en este universo generoso poblado de energías/ me dice tu nombre/ brillante,/ radiante,/ como un amanecer de verano./ Un himno glorioso acompaña a los astros/ y una melodía pequeñita arrulla a los niños./ Es la hora del sueño./ No te preocupes,/porque yo te ilumino/desde mi refugio infinito,/ yo te protejo con la luz de mi corazón,/ yo te amo/ desde el principio de los tiempos//Hay algo de risueño, a veces, en estas breves reflexiones sobre lo que nos rodea, como estas líneas sobre una pequeña flor silvestre de nuestra zona: Botón de oro: Este botón extravió su ojal de festones./ Su nácar dorado /se está convirtiendo en plástico./ Pero... ¡No! Ésa es una pesadilla ecológica./ Mi verdadero botón de oro/ me deleita como el azúcar flor,/ es gustoso como el azafrán,/ perfectamente redondo./ Está lleno de estambres muy viriles,/ de pistilos muy femeninos,/ formando flores tubulosas,/ apiñadas en globos de cera./ Se me escapa,/ no me saluda,/ no me guiña el ojo,/ no entra por la ranura de mi alcancía./ En resumen, /no juega a desabrocharme la blusa./ Botón de oro,/ te echaré de menos /cuando finalmente te pierda.//